Algo que no puede faltar en todo
aquel que realiza el Camino de Santiago son sus elementos identificativos que
te indican que el que los lleva es un peregrino. Nosotros no íbamos a ser menos
y después de leer mucho en los foros comprendimos que todo aquel que emprende
su peregrinaje hacia la capital gallega no le debe faltar la vieira con la Cruz
de Santiago y una piedra para depositarla en la Cruz de Hierro.
Como es lógico, todos nosotros
identificados esos dos elementos junto con la peregrinación a
Santiago de Compostela, pero realmente no sabíamos el por qué de tener que
llevarlos y convertirlos en nuestro fieles acompañantes durante nuestro trayecto. (Comentar que la información que describo a
partir de estas líneas está sacado del infinito mundo como lo
es Internet y de otros bloggeros que conocen bien este tema.)
LA VIEIRA DEL PEREGRINO
En referencia a la concha de mar,
la Vieira, existen muchas opiniones al respecto. Una de las leyendas y quizás
la que más me gustó cuando la leí, cuenta que sucedió en las inmediaciones del
lugar donde se varó la barca que transportaba los restos del apóstol Santiago
desde Palestina.
La verdad que intentaremos seguir
indagando a costa de los lugareños de la zona, según nos vayamos acercando a
tierras gallegas, en estas y otras leyendas relacionadas con el Camino de Santiago
y todos los orígenes de sus elementos adheridos con el paso de los años.
CRUZ DE HIERRO
En cuanto a la Cruz de Hierro o
Cruz de Ferro también se cuentan distintas historias y leyendas en cuanto a su
orígen se refiere. Dicha simbolo es un crucero que se halla en el punto más alto del
Camino de Santiago Francés, situado entre las localidades de Foncebadón y
Manjarín, pertenecientes al municipio de Santa Colomba de Somoza (León,
Castilla y León, España).
Está formada por un poste de
madera de unos cinco metros de alto coronado por una cruz de hierro, réplica de
la original conservada en el Museo de los Caminos de Astorga. En su base, con el paso de los
años, se ha ido formando un montículo en el que una leyenda cuenta que cuando
se construyó la Catedral de Santiago de Compostela se pidió a los peregrinos
que contribuyeran trayendo piedra. En este sentido, la tradición es lanzar una
piedra, traída del lugar de origen del peregrino, de espaldas a la cruz para
simbolizar que se ha dejado atrás el puerto.
No podía ser menos y nosotros
también cargaremos con nuestra piedra (una de Mérida, otra de Villanuena de la
Serena y dos de Fuentes de León), eso sí, los cuatro que vamos a realizarlo
hemos decidido que está tradición será para nosotros algo simbólico, no
queremos llevar más de 5 kilos de roca en nuestras alforjas jeje¡¡ pues que ya
sepamos la Catedral de Santiago se encuentra totalmente construida. Como no, también llevaremos unas
vieira con la Cruz de Santiago, elaboradas por mi padre Pepe, que nos convierte
en auténticos peregrinos.
Elaboradas por el artista de mi padre Pepe